Rompecabezas de Piedra: A un planeta multipolar como el que hoy surge hay que acompañarlo con una serie Multidimensional

    Ravenwild 

 ++Rompecabezas de Piedra++

 

    Heedless One

Nuestro lugar de trabajo es mucho más grande por dentro que por fuera, flota enorme es cierto, aunque es difícil imaginar como se abre y ramifica cuando lo recorremos por su geometría especial, se dice que es uno de los mayores logros de nuestra ciencia, que es una especie de juego que contiene infinidad de probabilidades de existencia, que lo concretamos a la medida que elegimos ciertas derivaciones y no otras, de allí que los equipos mínimos sean parejas para que la aleatoriedad disminuya por la decisión acordada entre ambos

            Reflections

Digo que da la impresión de que existen leyes que suspenden su funcionamiento cuando pensamos y otras que lo suspenden cuando no pensamos 

Ja, ja, si fuera así Ferdinan moraríamos en una gigantesca conspiración donde sus manipuladores serían la propia naturaleza y la realidad, exagerado y confuso... por lo menos para mi contestó Lidar

    Worship

Continuamos desplazándonos por los pasillos asépticos y relucientes del redondeado vientre de la sección que visitábamos mientras pasábamos frente a laboratorios cremas y rosados siempre deambulando en parejas, la jornada cumplida daba paso a otras actividades.

    Cloud Sprite

Nuestra tareas se centraban en reconstruir el dédalo del conocimiento, una parte significativa se había logrado, pero faltaban fragmentos, de allí la sensación de geometría descriptiva abollada que exhalaba, asimismo aún flotaban astillas en torno y hasta mezclados con los segmentos ya armados otras esquirlas que no pertenecían a este giro y quizás deberían ser encajados en su estructura como variaciones musicales de la misma canción. 

    Serene Master

Como adscritos gozábamos de transporte. Pero cuando por algún motivo no era así, nos deslizabamos igual que las muchedumbres callejeras por los toboganes de evacuación rápida, por encima espesas manadas de vehículos transitaban por las magnetovías, en el primer nudo de descanso caeríamos aleatoriamente por otros toboganes, magentas o celestes; por abajo, colgaban redes de puentecillos, arcadas, bloques, lo cual permitía a los viandantes braquiar para alcanzar sus sitios.

    Neon

Dados magenta y azul eléctrico semejaban competir por recibir a los transeúntes de los toboganes, los magenta esparcían un aroma leve y pungente que estimulaba, diversas pantallas recibían a la gente y la derivaban a puntos más o menos lejanos sin trámites adicionales en cómodos vagones.

                   Guns

Los celestes entregaban un olor amargo mientras se deshojaban arrojando lívidas luces. ¿Qué misterios encerraban esos cubos? En su placa de recepción, donde terminaba la lengüeta del tobogán, gesticulaban tecnochamanes provistos de collares condicionantes (por fungir de ajustadores) que se arrojaban a los recién bajados, si acertaban éstos quedaban sujetos a cumplir de inmediato jornadas de labores encaramados en rockabags (sintetizando: cohetecillos personales con deglureceptor para acumular detritos). Aquellos que no resultaran condicionados eran agrupados en convoyes de furgones y despachados a puntos previamente establecidos, a partir de los cuales podrían trasladarse a sus lugares de descanso.

                    Sesheyan

Aún recordaba la primera jornada en el dédalo, el tecnochamán no logró engañarnos, que suerte, lo reconocimos, representaba a la camada anterior a la nuestra, a los arcaicos compañeros mayores de juegos que aceptaron su rol como tornillos sociales, dedicados a los rituales mediocres y repetitivos que requería cierta capa de la sociedad para encontrar sentido a la existencia, así que eludimos los collares y nos embarcamos en los vagones.

    Radon

Sin embargo, aunque alcanzamos puntaje para laborar en el dédalo de laboratorios no era fácil conciliar tal faena con aquellas obligaciones relacionadas con la huella genética, de allí que resbalar por los taludes que conducían a los vivergas o trepar a las cimas donde anidan las mansaginas era postergado una y otra vez hasta que no existía otro remedio que cumplirla.

    Eta Cassiopeiae

En nuestro caso al arribar a la zona alta caminábamos a lo largo de los senderos mirando a todas y cada una e identificar a cual acudir para que nos otorgue génesis mediante un toque de sus dedos ajados, lo expulsado se guarda en una botellita que entregamos al gerifalte al retornar a nuestro barrio. Las chicas sólo tienen que sentarse sobre los vivergas con las piernas abiertas para recibir un chorro de sustancia, en la clínica completarán el ciclo extrayéndola.

    Tsabo Tavoc

Recuerdo cuando adolescente les increpaba a las descendientes femeninas menores que no deberían ir mostrando su vulva desnuda a los ojos de los andarines visitantes por las posibles interrupciones que eventualmente sufrirían retrasando su inserción en las esferas económicas. 

    Tchiri

Ni a ellas ni a nosotros nos imponían restricciones, podíamos entregar nuestro ano de manera repetida siempre y cuando cumpliéramos con el ritual de la huella genética. Las clínicas, una por barrio, llevaban el control de las camadas e intervenían para registro y control.

    Lay of the Land

Las relaciones de género eran fáciles y poco conflictivas, podíamos dormir donde quisiéramos y con quien deseáramos. Por hábito rondábamos en torno a las chicas. En parte era por el interés de que nos dejarán jugar con sus exquisiteces y de mirar en apariencia desinteresado o indiferente su triángulo bilabiado con la cereza en el centro, de allí a masajearlo y lamerlo sucedía en un tris, había quienes no eran considerados merecedores de esa práctica por zafios o bruscos, pero entre nosotros, los laborantes seleccionados, sobre todo cuando nos reuníamos lirondos en la explanada de suave césped para el ritual semanal mayor con cánticos y sahumerios podíamos terminar en una auténtica orgía, donde tan sólo debíamos proteger nuestros cuerpos de heridas o daños.

    Abducted!

En los albergues, se llevaban cabo multitud de interacciones, pero yo solía escabullirme para leer en mi campana de silencio y letras. Era cada persona con su caracoleta a cuestas, Allí en su interior sentado y meciéndome en una mariapalito o una hamaca devoraba pantalla tras pantalla, en torno a mi el aire se tornaba amarillo, lo cual significaba máxima concentración, desde ese acontecimiento ya se me pronosticaba que sería reclutado por el sector científico. Las campanas de silencio son transparentes y su aire adquiere colores según las acciones que ejecutáramos. Cuando tenía ganas de masturbarme me aliviaba con enérgicas sacudidas y el placer llegaba en alas líquidas para disolverse en un aire bermellón.

    Elf Covert Ops

La huella genética permitía rastrear nuestros cercanos allegados, una adolescente que podía ser mi hermana me gustaba, siempre la buscaba y en una ocasión logré aislarme con ella en un sendero marcado por magnolios, flamboyanes, jacarandas y guayacanes, que por las maniobras del equipo de biólogos coincidían en sus ciclos florales. 

                 Across the Yellow Brick Void

Ella se alisaba el pañuelo violeta que cubría su vulva, el resto de su atuendo era una mezcla de egipcia y sioux Dakota con muchos collares que colgaban sobre sus tetitas incipientes, en realidad atrae mi mirada e inflama mi deseo, me arrodillo frente a sus muslos y soplo sobre su leve pañuelito que se levanta y deja inerme en toda su gloria a la fenda que palpita, apoyo mi frente sobre su Monte de Venus y comienzo a lamer suave y constante hasta que ella se deja caer aunque arqueando su cuerpo para ofrecerme la hendidura como si fuera un fruto. Nos sumergimos en el brillo meloso del largo y sangriento atardecer y cuando emergemos ambos parecemos transmutados.

    Sustainer of the Realm

La vuelvo a ver en las orgías semanales de la comunidad, sin embargo allí me dedico a sobar y rozar a la más cercana y no la busco, acaricio nalgas hasta que ceden a mi presión pletóricas de néctares exquisitos; tanto las presencias masculinas como las femeninas solemos aplaudirnos si las performances son memorables, consigo algunas veces destacar, cada vez menos. Gesticulación pueril y lamentos estridentes menudean, pero tras la inclusión en el equipo científico del dédalo me convierto en mirón.

                  Alabaster Staff

Hoy ocurre algo peculiar, Lidar no vino al dédalo, exhausta por la orgía del día anterior, yo de mirón me recogí temprano, es mi primera vez en solitario, me extravío y aparezco una y otra vez en el mismo lugar a pesar de persistir en mis esfuerzos por alejarme de allí, memorizo, trazo líneas, converso con los orientadores que tropiezo y según lo que me informan clasifico, trazo gráficos, establezco similitudes, como las paredes son impenetrables no las mancho o coloreo, creo observar leves diferencias que después resultan falsas, es francamente desesperante.

    Serra Angel

Mi seguridad de salir de la situación estriba en que las piezas son siempre precisas para encajar en los diseños modulares y aunque con lentitud la posibilidad de manipulación proporciona esperanza, tras un recodo inopinado se expande una cúpula enorme con numerosos agujeros, creo reconocer una pauta y accedo a una serie entrelazada de aposentos, el suelo cubierto de arena y erizos, el paramento cubierto de caracoles, allí termina su semejanza con lo marino.

    Aven Archer

Escucho un estruendo y una carroza mortuoria, de las usadas para disponer de los restos de los vivergas y las mansaginas, empieza a perseguirme y frustra mis intenciones de infiltrarme hacia los aposentos que percibo a derecha e izquierda y escapar, no importan las características de las cámaras, empiezo a preocuparme y a asustarme, quiero que acabe el suplicio de la irracional persecución, sufro y observo las talladuras que la cubren y quizás trasmitan un mensaje, eso es, un mensaje ¿de quién?, claro debe ser de Lidar.

    Xenon

Permito que la carroza me alcance y con una extensión me atrapa y me coloca en el pescante, allí me sepultan aludes de recuerdos, sistemático los bloqueo o los borro, me desembarazo de la mayoría, englobo a la carroza en una burbuja, la convierto en recuerdo y la borro, me entusiasmo creo que vuelvo al juego y manejo mi material, pero al final del túnel un paisaje novedoso se abre, calles tenebrosas y galerías de cemento (material que conozco pero que no se usa en mi sociedad) repletas de figuras turbadoras que me impulsan a huir, entre la multitud su roce me enerva y me oculta, me otorga un plus de seguridad para actuar.

    Maralen

Observo los rostros vigilantes, me guían hacia máquinas que expulsan fichas según las secuencias de pulsado que teclees, las fichas son fragmentos geométricos discernibles de las piezas que deberíamos manejar Lidar y yo, será en el contexto mismo de la realización manual con las fichas donde encontraré la respuesta, con dos puñados de fichas giro y veo que muchos rostros están vueltos y pendientes de lo que pueda proferir, sin decir palabra en medio de un ensordecedor silencio principio a huir de nuevo y se que al retorno tras vislumbrar la clave el juego no se habrá desbaratado y podremos iniciarlo otra vez o... será que existiremos cual sombras en una conspiración?.

    Aviary Mechaninc

&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&& 

El vertiginoso maremágnum del Multiverso alberga desde las más desquiciantes manifestaciones de complejidad hasta las más hermosas plasmaciones de vida inteligente múltiple, así que aquella que describiremos a continuación consagrada a enfrascarse en juegos diversos donde se ganan puntos según sean los desenvolvimientos de los agentes participantes es solo una corroboración de ese prístino apotegma.

                     Shadow Seattle

 La civilización que nos ocupa es capaz de extraer energía de su sol y de varias estrellas vecinas para alimentar su repertorio de entretenimientos que se extiende virtual y físicamente por lunas y planetas de sus sistema, se ha establecido que cada habitante tiene derecho a un mínimo de dos miniuniversos de bolsillo y un máximo de diez para desplegar sus estrategias y acumular puntos, las derrotas significan perder una pareja de multiuniversos en favor de uno o varios ludópatas (de no lograrlo entonces deben ponerse de acuerdo para cederlos íntegros a un solitario, como se denominan a los que aún no reciben los suyos),

                        Mandraque

Los miniuniversos iniciales están estandarizados y los moradores aprenden los rudimentos del juego desde infantes para que no existan ventajas más allá de las proporcionadas por el talento, las habilidades o las emboscadas. Complejizarán las características de sus miniuniversos conforme avancen las peripecias, no se permiten duelos físicos pero si regalos de paquetes de información. Los que quedan con cero son agrupados en un planetoide especial donde se dedicarán a juegos de carne para los y las turistas que arriban a relajarse y vivenciar en superlativo.

    Alexi, Zephyr Mage

Uno de mis miniuniversos arroja lecturas inquietantes, algunos y algunas de mis laborantes (ningún ajustador ni personal médico ni símbolos míticos han sido afectados) sufren de anómalos extravíos que les convierten en merodeadores libres o en trashumantes iluminados (dentro de lo programado y sin embargo rozando el borderline o límite y casi escapando al lance de la tarea encargada, lo cual me obliga a atender tal vicisitud. 

    Elven Huntress: Wren's Run Packmaster

&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&& 

Justificación y Pinacoteca 

     Aerie Mystics

El mundo multipolar se está plasmando a una velocidad tal que uno no alcanza a leer una noticia sobre su avance cuando ya otra la reemplaza en nuestra atención, y no es sólo en el campo de la geopolítica, ocurre similar en lo científico y lo tecnológico, revisar nos asombra, criptón para empujar a las naves espaciales, energía eólica sin movimiento, motores eléctricos tan eficientes que parecen sueños, descubren la fuente de la juventud en el talasetum, motores de madera, etc. y eso sólo esta semana.

    Jewelled Torque

Ante tal aluvión decidí ir cerrando (o prestando menos atención) a mi saga del Imperio Decadente, que el real está en barrena), y expandir para reemplazarla a una línea de relatos caótica, repleta de ruptura de límites, menos sometida a parámetros, o sea libre, que recupere una cierta sensación juvenil, que denominaré Multiversual Revisado, ahora también acompañando a Horizonte Cercano; en cuanto a quien ilustraría acepté una sugerencia de Arcadio y Mark Zug fue el elegido. 

   Gaea's Cradle
 

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Un Deseo denominado Axxón

La Flor de Coleridge: TrazHOmenaje 01 de la Historieta Argentina

Qoyllur: Aporte a la historia temprana de la ciencia ficción en Perú